El PRI pierde la alcaldía de
Pachuca de Soto porque el actual titular vilipendio los patrimonios culturales de la
ciudad como quiso, su visión de empresario fue desmedida y finalmente no la
aterrizo eficientemente, y los resultados de su gestión se reducen a una cosa,
la deformación y/o destrucción de la Plaza Independencia, si de por sí, turísticamente
la zona centro no despega, ahora menos. El TuzoBus tampoco colaboró, aunque esto
es más responsabilidad del Gobierno Estatal.
A Mirna Hernández no le alcanzaron
todas esas redes que se dedicó a construir durante todo el tiempo que fue
diputada federal, creo que debe extrañar serlo, haber aceptado de mala gana ser
la candidata a la Presidencia Municipal de Pachuca pasó factura. A pesar de que
llovieron despensas y propaganda en las colonias populares y barrios altos de
la ciudad no fue suficiente.
Yolanda Tellería, no sólo logró
conectar con el público votante del nivel socioeconómico medio bajo de Pachuca,
sino con las “señoras bien” de Pachuca, Tellería logró dejar buena impresión
con la población en general, experiencia, mujer empresaria, madre de familia y
buena esposa, ahora el reto que tiene es mayúsculo.
Parquímetros, fotomultas,
destrucción de patrimonio cultural, ciclo vías erróneamente interconectadas, crecimiento
y ordenamiento territorial mediocre, ya no hablemos de empleo e inversión, es
lo que suma a una gestión de totalitario como se manejó en los últimos dos años
el Ingeniero Eleazar.
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